figura Sobreposición de imagenes de mayo a julio 2019. Temperatura superificial del nivel del mar en julio 2019. Valores promedios de 17 a 31 grados centigrados.
Fuente: NOAA. NCEP. con fines didácticos. Imagen propiedad de NOAA.NCEP.
Pronosticado por NCEP-NOAA en 2019
Se esperaba una transición de El Niño a ENSO-neutral el próximo mes o dos ( Agosto - Setiembre) , con el ENSO neutral probablemente continuando durante el otoño e invierno del Hemisferio Norte.
Durante el mes de junio, se reflejó El Niño en la presencia continua de temperaturas de
superficie oceánica por encima de lo normal (SSTs, por sus siglas en inglés) a través del Océano Pacífico
central (Fig. 1).
Sin embargo, las anomalías en la temperatura de superficie oceánica disminuyeron
durante el mes

Gráfica mostrando los valores de anomalías superior al promedio de temperatura de las aguas en el oceáno Pacífico. Para el sector de centroamérica los valores apenas superan los 0.5 grados con relación al promedio de temperura. Indicador de debilitamiento del fase Niño del ENOS.
Adaptado de: CENTRO DE PREDICCIONES CLIMÁTICAS/NCEP/NWS
y el Instituto Internacional de Investigación para el Clima y la Sociedad
Traducción cortesía del: NWS-WFO SAN JUAN, PUERTO RICO con fines divulgativos y de extensión del conocimiento hacia poblaciones vulnerables.
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Fenómeno el Niño. Información para su entendendimiento.
El
Fenómeno de El Niño, es conocido desde el siglo XX en la cuales los registros
documentan pérdidas importantes en sectores estratégicos de la producción y la
actividad económica de diversos países, principalmente en América, Asia y
Africa.
Aunque
sus impactos son conocidos y existe un monitoreo de variables atmosféricas –
oceánicas que detectan su aparición, el enfoque esta centralizado mayormente al
tema de la sequía. los primeros
impactos ocurren en el oceáno, específicamente con la modificación de las
temperaturas del agua en superficie y subsuperficie, de 0 a 200 m. de profundidad,
modificando las cadenas alimentarias por el calentamiento, y en consecuencia a
la pesca y ecosistemas marinos.
En
Costa Rica, el fenómeno del Niño con la manifestación del 2014-2015, y la
reciente 2018-19, confirmaron déficit de agua en áreas específicas como la
región del pacífico norte, pacífico central y algunos sectores del Valle
Central.
Medios
de comunicación colectiva, recolectaron la percepción del déficit hídrico en la
Zona Norte de Costa Rica, cantones de los Chiles y Upala, con algunos impactos
en la producción de frijol, pasto y ganado.
En el cantón de Sarapiquí, cuenca del río Sarapiquí, reportes de grupos
de trabajo en emergencias como los comités municipales de emergencias (CME),
detectaron variaciones importantes en las captaciones de agua que se reflejaron
en el suministro de agua de colectores comunitarios denominados ASADAS, que
operan como juntas comunitarias de administración y distribución del agua.
Lo
anterior, refuerza que la fase cálida ENOS, en Costa Rica corresponde a una
anomalía en los patrones de distribución del agua, que afecta las relaciones
del ciclo del agua, en atmósfera y superficie.
De
acuerdo, con el IPCC ( Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, en su
5to reporte de evaluación), el Niño se refería inicialmente a una corriente de
aguas cálidas que discurre periódicamente a lo largo de la costa de Ecuador y
Perú, alterando la pesquería local. En
la actualidad, designa un calentamiento del agua en toda la cuenca del Oceáno
Pacífico Tropical al este de la línea internacional de cambio de fecha. Este fenómeno atmósfera-oceáno acoplado, cuya
frecuencia de aparición habitual abarca entre 2 y aproximadamente 7 años, es
conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS), uno de los indicadores mas
comunes de detección corresponde al aumento de las temperaturas superficiales
del mar en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial. Otra confirmación está referida a la anomalía
de presión den superficie entre Tahití y Darwin.
Referencias
IPCC 5th
Assessment Report, WG 1 Glossary